10-04-2019
Entrevista a SIRA REPOLLES LASHERAS Coordinadora del Programa de Anticoncepción de Aragón. Servicio de Ginecología Hospital Clínico Universitario de Zaragoza Desarrollo profesional para la mejora de la atención sanitaria. Accésit 16ª Edición de los Premios Profesor Barea. Programa de atención anticonceptiva en Aragón
Licenciada en Medicina y Cirugía, pronto se especializa en Obstetricia y Ginecología, ¿qué le lleva a elegir esta disciplina?
A pesar de que en mi caso no teníamos ningún médico en la familia, desde muy pequeña quise ser médico y ninguna otra profesión. Comencé mis estudios de medicina y, desde el primer curso, quise dedicarme a la ginecología, lo tenía igualmente claro. Fui muy afortunada al poder dedicarme a lo que quería y disfruto mucho de mi profesión. Me apasiona el origen del ser humano y el funcionamiento de nuestro cuerpo. No dejo de aprender día a día y cada vez me parece más impresionante.
Participa activamente en la docencia de médicos de Atención Primaria, Enfermería y Matronas, ahora que sobre la mesa se ha puesto el foco en la Atención Primaria, en su opinión, ¿hasta dónde ha de llegar la Primaria y dónde empezar la Especializada o, quizá, como mucho se dice, el hospital debe ser la continuación de la AP?
Entiendo la asistencia sanitaria y la salud como un derecho. Como tal, hay que garantizar la equidad en la asistencia y acceso a este derecho. España tiene una red sanitaria pública potentísima en Atención Primaria, y la dotación de estos centros básicamente es la misma con independencia de su localización geográfica. Acercar la sanidad al individuo es nuestro deber y nuestro derecho. En este sentido, la frecuentación de las consultas de Atención Primaria, por parte de las mujeres españolas, es altísima. La cercanía de los profesionales de Primaria y la calidad de su asistencia, hace que sea el punto de entrada idóneo para todas las prestaciones. Todo aquello que pueda solucionarse en Atención Primaria es garantía de inmediatez y accesibilidad, algo fundamental para la percepción del usuario como calidad de asistencia. Es, desde Atención Primaria, desde donde deben decidir cuándo la asistencia debe ir más allá y solicitar la colaboración de un Especialista.
Profesora Asociada de Ciencias de la Salud de la Facultad de Medicina de Zaragoza, ¿cree que los alumnos de hoy en día están más preparados y la competitividad es mayor?
Cada día, la carrera de medicina se asemeja más a una carrera de obstáculos. Los médicos son, hoy en día los estudiantes universitarios que más formación requieren y que más filtros deben pasar, vamos, que quedan “los mejores”. En este sentido, no me gustaría pensar que la medicina se ha deshumanizado y se ha convertido en una carrera que se elige por esta excepcionalidad. La competitividad es altísima desde las aulas, y posiblemente estemos perdiendo algo de esa humanidad y entusiasmo que creo imprescindible para ejercer esta profesión (lo que antes se llamaba “vocación”). Los alumnos, y después los residentes, están extraordinariamente preparados académicamente. Lo otro no se puede estudiar. Para ser un buen médico tiene que gustarte el trato con el ser humano y tener “empatía”. Todavía quedan muchos de estos… no sé si todos. Es miembro de equipo en varios proyectos de Investigación del IACS, ¿en qué proyectos trabaja en la actualidad?
Me encanta la docencia y participo en casi todas las acciones que, desde el IACS, se ejecutan en este sentido. En el momento actual, las líneas fundamentales en las que trabajo son en el campo de la Anticoncepción, Violencia de género y Atención a la diversidad sexual. Por supuesto también en otros campos de mi especialidad como son: Cirugía laparoscópica, menopausia y sexualidad.
España es uno de los países que, a nivel internacional, más reconocimiento recibe en cuanto al alto nivel de sus investigadores, pero, por otro lado, se habla de la falta de inversión en esta materia y la fuga de cerebros por las malas condiciones laborales de los investigadores, ¿cuál es su percepción al respecto?
Evidentemente, en España, dedicarse a la investigación, solo puede hacerse con vocación. Es un trabajo duro, mal remunerado y de resultados a largo plazo. Para los médicos es especialmente difícil, porque todos debemos compaginar este trabajo con nuestra labor asistencial. No se puede entender de otra manera, puesto que para nosotros el contacto con el paciente es imprescindible para avanzar en el conocimiento científico y, cómo no decirlo, porque la remuneración que se percibe es insuficiente sin nuestro complemento asistencial. Así pues, el esfuerzo que debemos hacer es doble, en dedicación y horas de trabajo. Es algo que no es nuevo para nosotros, pero esta profesión es la que hemos elegido.
¿En qué consiste y qué ha significado el trabajo presentado a la 16 Edición de los Premios Profesor Barea?
Es un proyecto de mejora asistencial, que, si bien está centrado en el paciente, implica a todos los ámbitos de la sanidad. Para tener acceso a la anticoncepción existían gran cantidad de obstáculos: Organizativos, profesionales e indefinición de vías y circuitos. Esto derivaba en una inequidad en el acceso a esta prestación. Las tres líneas generales fueron: Mejorar la formación de los profesionales, mejorar y facilitar el acceso a la prestación y reducir o eliminar el coste de esos métodos. Esto se consiguió con una serie de acciones específicas: Homogeneizar la ruta de acceso, redefinir las competencias y responsabilidades de los profesionales, con eje fundamental en la matrona de Atención Primaria, establecer criterios homogéneos y circuitos de derivación, elaboración de guías y protocolos y un ambicioso plan de formación de los profesionales.
¿Cuál era el objetivo principal del Programa de Anticoncepción de Aragón presentado a los Barea?
El objetivo fundamental es “eliminar barreras para garantizar el acceso a la Anticoncepción en condiciones de Equidad a todas las mujeres aragonesas, con independencia de su condición y su lugar de residencia”.
En la actualidad, ¿en qué punto se encuentra su implementación?, ¿podría extrapolarse a otras Comunidades Autónomas?
El programa se encuentra implementado en la totalidad de la comunidad autónoma. Las mujeres aragonesas tienen acceso a la anticoncepción que desean con una buena información, con unos profesionales capacitados y formados específicamente para garantizar la calidad de la asistencia. No existen las listas de espera para la provisión de métodos anticonceptivos y tenemos financiados todos los métodos de larga duración (LARC), que son aquellos más efectivos. El 70% de las prestaciones en anticoncepción se solucionan en Atención Primaria y en un año triplicamos el uso de los métodos de larga duración. Todas las acciones son extrapolables a otras comunidades autónomas, con sus peculiaridades. Uno de los puntos fuertes de este programa es que aprovecha las estructuras y recursos existentes, modificando su funcionalidad. La financiación de todos los LARC es una medida costo-efectiva a medio plazo y permite incluso no solo mejorar la atención anticonceptiva, sino ahorrar muchos miles de euros generados por los embarazos no planificados.
Centrándonos en dicho proyecto, “Programa de Atención Anticonceptiva en Aragón”, ¿qué datos considera más relevantes?
Hoy en día, en Aragón el consejo anticonceptivo se realiza prácticamente “a demanda” por parte de los profesionales de Atención Primaria. Éstos han recibido una formación Reglada y acreditada, que garantiza la calidad de la asistencia. La frecuentación de las consultas es fluida, y la interrelación con especializada es homogénea. El 74% de las demandas de anticoncepción se solucionan en Atención Primaria. La capacitación de los profesionales (especialmente matronas) en la provisión de algunos métodos ha multiplicado hasta por 12 el uso de alguno de ellos. Las consultas son de “alta resolución” y el 98% de las matronas han adquirido las nuevas capacitaciones y las implementan sin problemas. Y lo más importante, a pesar del aumento de la carga de trabajo, el 95% de las matronas se encuentra satisfecha o muy satisfecha con el programa. La financiación pública y completa de todos los LARC ha sido una de las medidas más costo-efectivas. Si nos centramos en la mejora tendríamos:
Por último, ¿cree que se deberían potenciar los trabajos o estudios de investigación, en todos los ámbitos, como lo son los presentados a los Premios Profesor Barea? Por supuesto. Para mi, ha sido un descubrimiento, el comprobar que las acciones puntuales pueden modificar la sociedad, y como aprendemos de todas las pequeñas mejoras en cada ámbito, para alcanzar la excelencia en el funcionamiento de nuestro Sistema Sanitario, cuyo centro es el paciente. Conocer lo que hacen otros profesionales en otros ámbitos es muy enriquecedor y, a la vez, supone un estímulo para trabajar más y mejor. Sin estas acciones de puesta en común de ideas exitosas y efectivas, el conocimiento se limita a nuestro entorno más cercano y no nos permite ir más allá. Conocer y compartir ideas es fundamental para avanzar. |
“La cercanía de los profesionales de Primaria y la calidad de su asistencia, hace que sea el punto de entrada idóneo para todas las prestaciones. Todo aquello que pueda solucionarse en Atención Primaria es garantía de inmediatez y accesibilidad, algo fundamental para la percepción del usuario como calidad de asistencia. Es, desde Atención Primaria, desde donde deben decidir cuándo la asistencia debe ir más allá y solicitar la colaboración de un Especialista”
“La competitividad es altísima desde las aulas, y posiblemente estemos perdiendo algo de esa humanidad y entusiasmo que creo imprescindible para ejercer esta profesión (lo que antes se llamaba “vocación”). Los alumnos, y después los residentes, están extraordinariamente preparados académicamente. Lo otro no se puede estudiar. Para ser un buen médico tiene que gustarte el trato con el ser humano y tener “empatía”. Todavía quedan muchos de estos… no sé si todos”
“Evidentemente, en España, dedicarse a la investigación, solo puede hacerse con vocación. Es un trabajo duro, mal remunerado y de resultados a largo plazo. Para los médicos es especialmente difícil, porque todos debemos compaginar este trabajo con nuestra labor asistencial”
“Es un proyecto de mejora asistencial, que, si bien está centrado en el paciente, implica a todos los ámbitos de la sanidad. Para tener acceso a la anticoncepción existían gran cantidad de obstáculos: Organizativos, profesionales e indefinición de vías y circuitos. Esto derivaba en una inequidad en el acceso a esta prestación. Las tres líneas generales fueron: Mejorar la formación de los profesionales, mejorar y facilitar el acceso a la prestación y reducir o eliminar el coste de esos métodos”
“Todas las acciones son extrapolables a otras comunidades autónomas, con sus peculiaridades. Uno de los puntos fuertes de este programa es que aprovecha las estructuras y recursos existentes, modificando su funcionalidad. La financiación de todos los LARC es una medida costo-efectiva a medio plazo y permite incluso no solo mejorar la atención anticonceptiva, sino ahorrar muchos miles de euros generados por los embarazos no planificados”
“Conocer lo que hacen otros profesionales en otros ámbitos es muy enriquecedor y, a la vez, supone un estímulo para trabajar más y mejor. Sin estas acciones de puesta en común de ideas exitosas y efectivas, el conocimiento se limita a nuestro entorno más cercano y no nos permite ir más allá. Conocer y compartir ideas es fundamental para avanzar” |